En este contexto, la adopción de una escala proporcionada, la creación de zonas permeables y conectadas con la trama existente, el marcado carácter paisajístico o el uso de ETFE para cubrir los espacios públicos, son algunas de las estrategias para el desarrollo de un proyecto urbano, coherente y sostenible que dotará al centro ciudad de una imagen contemporánea e innovadora.
Emplazado en un terreno industrial en el corazón de la Louvière, el proyecto de usos mixtos tiene por objetivo reconstruir el tejido urbano de centro ciudad, ubicado entre el ayuntamiento, el teatro y el museo Ianchelevici y la estación de ferrocarril.
El proyecto se plantea en torno a tres premisas: la urbanística, mediante la conexión con la trama urbana; la funcional que ordena los usos relacionándolos con las prexistencias y la paisajística, que asocia el parque lineal a un bosque urbano de exuberante vegetación, Le Jardin, generando un gran corazón verde.
A nivel funcional, se prevé un programa mixto que incluye comercio de calle y ocio, vivienda, servicios médicos y espacios de coworking, todo ello asociado al uso cultural existente en el ámbito del proyecto protagonizado por el Museo de Cerámica Keramis y el centro filarmónico.
Formalmente, se propone una arquitectura a escala humana en la que los edificios se conforman no solo como piezas singulares o partes de un tejido sino como ámbitos de relación entre las áreas verdes. Situado en el centro del proyecto y con vistas al parque, un edificio destinado a los espacios de coworking se expresa con identidad propia.